Hace
unos días dedicaba un post a Hemingway y su pasión por los gatos con
polidactilia, hoy el protagonismo es para Frida Kahlo y su pasión por los
perros Xoloitzcuintlis. La pasión de la artista mexicana por estos perros se
refleja tanto en la gran cantidad de instantáneas en las que sale acompañada de
estos canes, como en las pinturas donde ella misma plasmó a los Itzcuintlis.
En
relación a las obras pictóricas de la artista donde plasmó perros
xoloitzcuintles, podemos mencionar: Escuintle y yo (1938), Autorretrato con changuito
(1945), El Abrazo de Amor del Universo,
la
Tierra (México), Yo, Diego y el Señor Xólotl (1949), Naturaleza
Muerta (1951), Danza al Sol (imagen contenida en su
diario Alas Rotas), además de una obra sin fecha titulada Xibalba-Alado-Xólotl-7 ríos
(Soñado por Frida Kahlo). El número de las pinturas será siempre inferior si lo
comparamos con el de las fotos que en diferentes medios se han publicado.
Investigando
más sobre esta raza y qué tipo de perro es el Xoloitzcuintlis nos remontamos a
la época azteca. El vocablo xoloitzcuintle, xoloescuintle, proviene del nahuatl
xólotl e itzcuintli, perro. El término xolotl conlleva varios significados,
pero todos relacionados a la misma raíz etimológica. Xólotl en sí es el dios
mexicano de la vida y la muerte, que comúnmente era asociado con figuras
monstruosas, también significando el término "monstruo". El
Xoloitzcuintle también es llamado perro pelón mexicano o perro azteca.
En
la Mitología mexica, se creía que los xoloitzcuintles acompañaban a las almas
de los difuntos cuando viajaban al Mictlán, el inframundo, por lo que eran
sacrificados y enterrados junto con los muertos a los que debía guiar. Hay
leyendas que hablan de que Xolotl le dio el xoloitzcuintle como regalo al
Hombre, habiéndolo fabricado de una astilla del Hueso de la Vida, el hueso del
que toda vida fue creada. Debido a esto era considerado sagrado por los
aztecas, manifestándose esta adoración en muchas representaciones esculturales
y pictográficas.
Después
de la colonización europea, este tipo de perro estuvo muy cerca de desaparecer,
siendo rescatado de la extinción por la apreciación hacia este perro de los
miembros de la FCM, la cual inició un programa de registro y reproducción el 1
de mayo de 1956. A pesar de que fue exhibido en las competiciones de belleza
canina, en los Estados Unidos desde 1883, y aceptado en las federaciones más
respetadas, no logró gran aceptación popular. A mediados del siglo XX su
popularidad en México tuvo un renacer, llegando a ser admitido en muchas
federaciones caninas mexicanas. En el presente es reconocido por muchas de las
más distinguidas federaciones en otros países y federaciones internacionales,
como la FCI, aunque en algunos países, como en los Estados Unidos, no tiene
tanta aceptación.
Diego
Rivera y Frida Kahlo criaron ejemplares de estos perros como mascotas,
convirtiéndolos también en animales de culto e inspiración para su obra. Son
buenos canes de compañía y dependiendo de su tamaño son también buenos
guardianes del hogar. Aunque no tiene una apariencia atractiva, el
xoloitzcuintle son populares por su inteligencia ya que es fácil educarlos, por
su resistencia y por su carácter amigable.
Actualmente,
y gracias a aquellas personas que ven a los perros como compañeros fieles, se
han convertido en unos canes muy populares. Normalmente son muy deportistas,
buenos vigilantes y singularmente tranquilos con la gente.
La raza tiene un
rango de peso de 4 a 20 kg. Su falta de pelaje causa una mayor pérdida de calor
corporal, por lo que su cuerpo se ve obligado a mantener una temperatura de
alrededor de unos 40 °C. Su apariencia es similar a la del Pharaoh Hound, con un cuerpo esbelto, ojos estirados, orejas
triangulares y rectas y un largo cuello.
La piel expuesta a
lesiones, heridas y fisuras se cura rápidamente. Además, no necesita cuidados
del pelaje, sólo en algunas ocasiones requieren una ducha caliente. Una de las ventajas de su falta de pelo es que no causa problema a las personas con alergia al pelo canino, y otra de sus ventajas es que las molestias frecuentes de pulgas y garrapatas son inexistentes. Sin embargo, como estos no han sido sujetos seleccionados, el pelaje
puede presentarse en distintas longitudes. El pelaje más valorado es un pelaje
corto y de colores sólidos en una amplia gama, con manchas blancas en pecho y
dedos.
Ante la falta de
pelo, la piel del xoloitzcuintle es extremadamente sensible, por lo que
requiere de la aplicación de crema humectante o pomadas calientes, de 2 a 3
veces por semana. En caso de una exposición constante al sol, el dueño de la
mascota tendrá que ponerle cremas protectora para evitar quemaduras.
Los xolos con
pelo son perros modestos, es decir, a la vista no tienen la espectacularidad
que tienen los xoloitzcuintles "desnudos". Se podría decir incluso
que son perros "corrientes" o mestizos, ya que conservan una
estructura fenotípica similar al perro prehispánico o mesoamericano, del cual
se cree surgió el xoloitzcuintle original.
Gracias
a personas enamoradas de los animales y que tuvieron mucha devoción por esta
raza, caso del marido de Frida Kahlo, que los incluye en sus famosos murales,
estos perros no lograron desaparecer y podemos admirarlos hoy día haciéndonos
una idea de su vasta Historia.