¿Cuántos de vuestros gatos ahora con el frío se esconden debajo de la manta o se juntan al calefactor?
Cuando llega el invierno los gatos al ser más sensibles que nosotros a los cambios de temperatura se resguardan como pueden, al no disponer de abrigos se colocan bajo mantas, la cama, nuestra ropa o incluso se echan encima del calefactor. Los gatos aguantan el contacto con hasta 50º de temperatura, de ahí que frecuenten los radiadores. Pero no por ello hay que despistarse pues su atrevimiento puede causarles algún susto!
Por ello, se aconseja no dejar los calefactores encendidos (o a muy alta temperatura) cuando salimos de casa y se quedan solos, pues podrían meter alguna extremidad y quemarse, o jugar y tirar el aparato, etc.
Hay gatos con mucho pelo que no necesitan demasiada protección ante la bajada de temperaturas, pero otros como el Sphynx que carecen de pelo sí requieren de una ayuda extra para entrar en calor. Muchas veces se recomienda dar un aporte energético extra, pero sólo para aquellos felinos que salen a la terraza, juegan por los tejados o el jardín, es decir, aquellos con mayor desgaste energético. Sin embargo, aquellos que se quedan en casa y no son muy movidos, no podemos darles mucho más de comer o engordarán. Ante estas temperaturas corren el riesgo de sufrir resfriados por lo que hay que buscar soluciones.
Ante estos casos, mantas, edredones y otras ropas calentitas serán su resguardo durante el invierno. Sin embargo, hay otra opción muy divertida y novedosa que he descubierto hace poco y me parece muy buena opción para los gatos más frioleros: ¡Jerséis para gatos!
Hace ya unos meses una marca coreana, Catspia, dedicada a accesorios especialmente pensados y diseñados para gatos, hizo una línea de ropa felina muy divertida y que en Asia y EEUU está funcionando bastante bien.
La marca realizó un estudio en el que demuestran que las ropas para gatos no sólo ayudan en las épocas de frío, sino que también previenen de la acumulación de bolas de pelo en el estómago pues evitan que el gato se lama y trague pelo.
Pero algunos de vosotros pensaréis ¿Mi gato se dejaría poner un jersey?, pues probaron con más de un centenar de gatos (de los trabajadores de la fábrica y voluntarios con gatos) y vieron que si se les acostumbra desde pequeños no hay ningún problema de adaptación, y en gatos mayores la media es de 7 días para que se acostumbren a ellos. Y todo ello con los beneficios de la reducción del frío (y consecuentes resfriados), y de las bolas de pelo! Y, además, están requeteguapos!!!!
Os dejo algunas fotos de los distintos modelos de ropas que ofrecen, en pocas semanas podrás encontrarlos en www.senoraparker.com. Ya me contarás qué te parecen, a mí me han cautivado por su originalidad y utilidad.
Ahora ya no son sólo los perros los que pueden ir guapos y abrigados, también nuestros amigos felinos pueden estar ideales y no pasar frío!!
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